Desde la llegada de la pandemia, nuestro hogar se ha vuelto mucho más habitado que nunca. Comemos más en casa, pasamos más tiempo por las restricciones, incluso hacemos actividades que nunca hemos realizado. Por todo ellos, vamos a relatarte las tres partes de tu hogar que más debes cuidar en la limpieza.
La cocina es una ubicación de la casa que tiene que tener una limpieza diaria, quizás no a fondo, pero sí a todos los días. Aquí se concentran posibles focos de infección y por ellos debe ser uno de los que más limpios deben permanecer. Sea mucho o poco tiempo, la máxima higiene es necesaria y recordamos esa importancia de lavarse las manos más que nunca.
El baño o zonas de aseo. Llegas a casa después de una dura jornada de trabajo y quieres darte una buena ducha de agua caliente. Pues esa ducha puede generar multitud de gérmenes y no limpiamos diariamente la bañera, cuando son zonas de gran acumulación de gérmenes.
Ahora vamos a hablarte del salón y del comedor. Son las dos zonas donde permanecemos la mayor parte del tiempo. Entramos en casa con los zapatos de la calle y pasamos por estas zonas y podemos ir dejando gérmenes sin darnos cuenta. Para eso, se recomienda utilizar toallitas húmedas cada día para pasarlas por muebles que tocamos frecuentemente, como las mesas y las sillas. No nos olvidemos tampoco de los pomos de las puertas. Y también muy importante darle un repaso al sofá. Evidentemente, si al llegar a casa nos descalzamos para limpiar nuestros zapatos y de la misma forma, nos lavamos las manos, reducimos mucho las posibilidades de contagio.